Hoy he vivido un día muy especial en el hospital de paraplejicos de Toledo.
Pude compartir con pacientes, familiares y trabajadores a los que admiro profundamente por su voluntad, esfuerzo y dedicación. Sin ninguna duda ha sido una inyección de energía positiva para mi también.
Fue bonito poder cantar juntos, la música es una gran compañera y la medicina para el alma y el corazón.
Fue bonito poder cantar juntos, la música es una gran compañera y la medicina para el alma y el corazón.
Gracias Ludovico, por acompañarnos con tu arte. Un gran abrazo a todos!