Los Angeles, Las Vegas y San Francisco

Parece mentira, pero en nuestro último concierto que hemos tenido en el Fillmore de San Francisco, nuestro tercer concierto consecutivo de esta semana, es donde mejor me he encontrado, esto no es normal teniendo en cuenta que cada concierto suma y te desgasta, más todavía cuando son en ciudades diferentes que los viajes suelen ser muy duros.

Volvamos al primer concierto de la semana, el día 12 en Los Angeles, después de tener 2 días y medio off, recuperamos las fuerzas completamente, incluso me dio tiempo a hacer un poco de deporte, me apetecía mucho correr, sabía que si hacía algo de deporte moderado, sería bueno para los próximos días.

En esta semana la energía del concierto se ha intensificado bastante, ya que el público asistió de pie, tal y como si de un concierto habitual de verano eléctrico se tratara. La gente recibió bastante bien el formato y todos lo pasamos muy bien, se acercó todo el equipo de Universal Music y mi amigo mosquetero Noel, me gustó mucho que conociera de cerca este nuevo sonido que he presentado durante 2 años por algunos países.

Esta semana volvimos a viajar en el Tour Bus. Para que veáis, no me gustó el viaje a Las Vegas ya que fue muy corto, apenas 4 horas desde Los Angeles y la adrenalina del concierto, la verdad no ayudó mucho a que me quedara dormido en el Bus pese a que era igual de cómodo que el primero que tuvimos en el primer tramo de la gira, así que casi estábamos llegando y no paraba de dar vueltas para conseguir dormirme, en ese momento deseé que el viaje fuera un poco mas largo.

Llegamos de madrugada a Las Vegas y puder dormir bastante hasta la hora de esconder las entradas en nuestro concurso habitual de esta gira Americana. El house of Blues de Las Vegas fue mágico también y la energía de la gente me hizo volverme loco de emoción, me gustó más el sonido del primer House of Blues en Los Angeles, pero de igual modo, fue un concierto donde me sentí cómodo y disfruté mucho del público.

Al terminar el concierto todos otra vez nos pusimos en camino hacia San Francisco, fue emocionante estar con todo el equipo viendo desde las ventanas del bus el espectáculo de la calle principal de Las Vegas saliendo hacia la autopista, express way para algunos... no dejará nunca de asombrarme y eso que ya he estado unas cuantas veces.

Aunque también me costó dormirme por la adrenalina y los chistes que contaban algunos chicos del equipo ja ja ja ja, el viaje fue bastante largo y pude descansar mucho mejor, no obstante, me quedé preocupado al llegar, ya que tenía la garganta muy reseca por el aire del autobús, normalmente bebo mucha agua y pongo un pequeño humidificador, pero ese día estaba muy cansado y se me olvidó por completo.

Llegamos a las 11 a San Francisco y pude dormir otra vez hasta la salida al soundcheck, me levanté como nuevo, había dormido muchísimas horas y eso es lo que prima a estas alturas de la gira en Usa, sobretodo no había que olvidar que esa noche, era nuestro tercer concierto consecutivo de la semana y sabía que se podía hacer cuesta arriba.

Imaginaos, lo que significaría para cualquier deportista de elite, jugar 5 partidos de baloncesto, fútbol o tenis seguidos, realmente necesitas o requieres de un estado de forma muy bueno. 5 conciertos en una semana, con un repertorio como el mío y en un formato acústico es muy complicado, pero no deja de ser un reto y por eso me gusta.

No se por que, pero juraría que en este tercero, en el concierto del Fillmore, San Francisco, me sentí mucho mejor que en Los Angeles y Las Vegas y, se supone que la voz se va gastando a cada concierto, pero aun así, tuve mejores sensaciones que los conciertos anteriores, estoy muy contento y más cuando me encontré a un público de lujo, gracias por venir a los conciertos.

Hoy, aunque no hubo concierto, ha sido muy duro, ya que el viaje a Orlando en avíon ha durado 5 horas, así que os podéis imaginar el día off ja ja.

Pasamos del pacífico al atlántico, de California a Florida para concluir la gira de USA en Orlando 16 y Miami 17.

Besos.